top of page
  • Foto del escritorsoymarubas

INSATISFACCIÓN INSPIRADORA




Hace un tiempo escuché en un podcast esa frase y quedó resonando en mi.


Inmediatamente lo asocié con mi experiencia personal, ya que me di cuenta que mi proceso de transformación, de cuestionamientos y de mucho aprendizaje, inició justamente con una insatisfacción.


Algo empezó a no tener sentido.


Para ese entonces había conseguido muchas cosas con las que había soñado desde chica, todo lo que había planificado para “ser feliz”.


Y de pronto empecé a sentir que nada de eso me llenaba, no sentía la felicidad que había planeado para ese momento.


Y cuando digo feliz, me refiero a que no tenía la misma alegría, no me reía tanto, no conectaba con el presente, no disfrutaba y caía seguido en la queja, estaba estresada, presionada por el trabajo, cansada todo el tiempo, y mi cuerpo empezó a sufrir las consecuencias.


Por primera vez en mi vida (y por suerte única) sufrí insomnio; mi piel empezó a expresarse, me broté la cara; y siempre presente mi dolor de estómago, mi fiel compañero de crisis.


Por un lado, cuando empecé a exteriorizarlo con algunas personas, lo primero que sentí fue que estaba siendo desagradecida con la vida, porque pensaba “tenes todo lo que siempre quisiste, ¿qué más queres?”. Me enojaba nucho conmigo misma.


Además me daba miedo terminar siendo una insatisfecha constante y me generaba mucha incertidumbre y ansiedad no saber qué hacer.


Y luego fui descubriendo algunos aprendizajes en ese camino:


  • Me estaba focalizando en el “tener”, (títulos, cargos, bienes materiales, vínculos, aprobación social) y no en mi propio valor más allá de eso.

  • Pasaba mis días aturdida, con música, ruido, rodeada de gente, del televisor, nunca en silencio (es decir, ninguna conexión con el silencio y conmigo misma, con mi voz interior, mi intuición)

  • Mi cuerpo se estaba expresando, y si quería sentirme bien me di cuenta que iba a tener prestarle atención y hacer algo (aunque todavía no sabía qué)

Este es sólo el comienzo de una historia de profundos cambios, pero lo que quiero destacar hoy, es que esa insatisfacción que al principio me dio miedo y me costó aceptar, en realidad fue la que me inspiró y la que impulsó.


Hoy habiendo transcurrido 10 años desde que sentí eso por primera vez, agradezco que haya aparecido esa insatisfacción y todas esas emociones incómodas, que lejos de ser mis enemigas, fueron las que me trajeron el mensaje que necesitaba moverme, que ese camino ya no era para mí.


Estemos atentos a esas insatisfacciones que se presentan en nuestra vida, capaz sean de las que nos inspiran a reinventarnos, transformarnos, para ser más felices, y disfrutar más de esta vida que es única y maravillosa.


35 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo
bottom of page